Inverness es la capital de las Tierras Altas escocesas; aunque no es una ciudad muy grande, en ella se concentran la mayoría de servicios de la zona y es un buen punto de partida para conocer las Highlands, pues cuenta con numerosos hoteles y bed&breakfast, así como restaurantes, pubs y comercios.
La ciudad está a unas tres horas y media en coche desde Edimburgo, muy cerca del famoso Lago Ness, y es escenario de uno de los eventos deportivos más conocidos del país, los Juegos de las Highlands (Highlands Games).
Está considerada la ciudad más fría de todo el Reino Unido, aunque durante el verano tiene un clima más agradable y es un placer pasear por el centro y conocer algunos de sus lugares de interés más famosos:
El Castillo de Inverness
Aunque no puede visitarse por dentro, ya que alberga oficinas gubernamentales, se puede visitar por fuera y pasear alrededor de su perímetro para disfrutar de su arquitectura y de unas buenas vistas de Inverness.
La Catedral de Saint Andrews
Una catedral pequeña pero de gran belleza, situada junto al río Ness y reconocible por sus dos torres.
El Inverness Museum & Art Gallery
Un museo que repasa la historia de la ciudad desde su nacimiento hasta la actualidad y puede orientarnos antes de recorrerla.
El Mercado Victoriano
Un antiguo mercado victoriano en el que aún puede apreciarse la arquitectura de la época. Alberga algunas tiendas, un par de pubs y tiene varias entradas.
Los puentes sobre el río Ness: no es que sean nada del otro mundo, pero al cruzar estos puentes para peatones y pararte a mirar a uno y otro lado, tendrás una buena panorámica de la ciudad, especialmente si te gusta la fotografía.
El Lago Ness
Es el motivo porque el que acuden a Inverness la mayoría de turistas, ya que se encuentra a tan solo 20 minutos de allí. Una vez estés por la zona del lado (que mide nada menos que 36 km de largo) puedes visitar el centro de interpretación dedicado a la historia de Nessie o recorrer las ruinas del Castillo de Urquhart.